A dos años del crimen de Emilio Lambíes, su familia sigue reclamando justicia.

“No nos olvidamos. Seguimos luchando, en silencio, pero seguimos luchando.”
El próximo domingo se cumplirán dos años del brutal asesinato de Emilio Lambíes, un vecino muy querido de la ciudad, quien fue asesinado en una violenta entradera cuando salía de su casa para ir a trabajar. A pesar del tiempo transcurrido, la causa judicial no presenta avances significativos: no hay detenidos ni imputados, y su familia sigue sin respuestas por parte de la fiscalía.
Luciana, hija de Emilio, volvió a alzar la voz para recordar a su padre, exigir justicia y mantener viva la memoria de quien fuera, según quienes lo conocieron, un hombre generoso, solidario y siempre dispuesto a ayudar a los demás.
“Es muy difícil para mí y para mi familia hablar. Pero queremos que se sepa que no hubo ningún cambio desde la última vez que nos vimos en Fiscalía (diciembre 2024). No tenemos contacto con ellos, no hay respuestas, no hay avances. Queremos hacer esta nota para que no se olvide, para mantener vivo el recuerdo de mi papá”, expresó Luciana, visiblemente conmovida.
El hecho ocurrió alrededor de las 7 de la mañana del 27 de abril de 2023, en la vivienda familiar ubicada en Juan José Paso al 1600. Emilio se disponía a salir rumbo a su trabajo cuando fue sorprendido por dos delincuentes que lograron ingresar a la casa y lo sometieron a una feroz golpiza. La violencia no se detuvo ahí: los atacantes irrumpieron también en el interior de la vivienda, donde redujeron a la esposa de Emilio y a uno de sus hijos, a quienes exigieron dinero y celulares antes de huir del lugar. Cuando la familia logró reaccionar, comprobaron con horror que Emilio había fallecido producto de los golpes recibidos.
Desde entonces, la familia Lambíes vive un calvario no solo por la pérdida irreparable, sino también por la falta de justicia.
“Hace casi un año que no tenemos novedades de Fiscalía. Y como la causa sigue en investigación, tampoco podemos decir mucho más porque puede entorpecer el proceso. Pero la realidad es que no sabemos nada. Y eso duele.”
Luciana y su familia aseguran que no bajarán los brazos. Quieren justicia, pero también honrar la memoria de Emilio, “el Negro Lambíes”, como lo conocía todo el barrio.
“Todo el mundo habla de él con cariño. Siempre ayudó a quien lo necesitaba, sin esperar nada a cambio. Nosotros nos sentimos muy orgullosos del padre que tuvimos. Estas fechas son duras porque vuelven todos los recuerdos, pero queremos que la gente sepa que estamos, que seguimos luchando, que no nos olvidamos.”
Este domingo, cuando se cumplan dos años de aquella trágica mañana que les cambió la vida, su familia lo recordará con dolor, pero también con amor y respeto. Y con un mensaje claro: la lucha por justicia continúa, sin importar cuánto tiempo pase.